Ajo - Allium sativum
No hay mucha información acerca del origen del Ajo, es altamente probable que sea originaria de Asia Occidental y que fue introducida desde allí en el Mediterráneo y luego a otras zonas donde se cultiva hace más de 7000 años.
Su nombre viene de Allium: nombre genérico muy antiguo. Las plantas de este género eran conocidas tanto por los romanos como por los griegos. Sin embargo, parece que el término tiene un origen celta y significa "quemar", en referencia al fuerte olor acre de la planta. El Ajo es un producto conocido desde la antigüedad en la gastronomia en donde su popularidad hace difícil establecer su origen.
Aunque un tanto exigente en su cultivo se adapta a cualquier lugar geográfico, con estaciones o sin estaciones. Aunque aparenta ser un tubérculo, el bulbo del ajo surge en la planta luego de su floración.
Gastronomía
El Ajo es un condimento base para cientos de platos de diferentes gastronomías y hasta obligatorio para muchos de ellos.
El Ajo y la Salud
Por su fuerte aroma luego de ser consumido ha creado una barrera en ocasiones para su consumo, la solución para ello es mordisquear un grano de café durante unos minutos, mágicamente desaparecerá el aroma del ajo en tu aliento.
Beneficios
Elimina bacterias y hongos intestinales. Ayuda a las personas que tienen colesterol alto y disminuye la presión arterial.
Esta planta tiene un alto poder antibiótico esta virtud se debe a la Alicina un aceite etéreo que destruye las bacterias causantes de las infecciones. El uso de este antibiótico natural tiene un gran ventaja, la acción de los antibióticos creados en laboratorio es efectiva pero las bacterias y los virus que sobreviven producen una nueva generación resistente, lo que NO sucede con la Alicina.
Ayuda a combatir estreptococos, hemolíticos, tifus para tifus y diferentes hongos y virus, incrementan los niveles de colesterol bueno, combate la tensión arterial alta, insomnio. Es diurético favorece la digestión, es vasodilatador anticoagulante y elimina gases del intestino.